de regreso a mi cementerio…
camino bajo los flashes ronquidos
y por la decisión de arriba de inundar
el paisaje de una sola vez
perdido en mi delirante caos, en cada
paso contabilizo charcos espejos rotos
que luego desaparecerán
al llegar a la puerta de mi mausoleo…
justo en el momento en que saco
las llaves… la lluvia cesa, las alturas
se despejan, el frío me despierta…
mientras que mi parte Negativa se
enciende escupiendo sonoramente
“me siento meado por los cielos”
al mismo tiempo mis guías y demonios
riéndose, internamente me dicen:
“menos mal que no cayó granizo, sino,
también te hubiesen cagado el camino”
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