sangre y oscuridad ciñen su cuerpo
artesano despierto y atrevido
bajo mi tacto leo la textura que la cubre
en cada detalle viajando por sus curvas
llaves escarlatas a nudos sin fin,
signos que se multiplican para
liberar a mis ojos el deseo
cirujano demonio en autopsia
de lo escondido, tranquilo y paciente
desgarro la falsa piel sin piedad
sus pechos respiran emergiendo
lentamente, sus pezones me llaman
para endulzar viejos cafés a medida
se endurecen dentro de mi ciega boca
lentamente la brea enrojecida se derrite
y resbala despertando los poros de la
tentación hasta formar una base a sus pies
escultural Mujer de fuego…
desde el infierno a los cielos
mis labios moldean entre sus piernas
los vientos cálidos sin orientación,
donde la poesía fluye por la fricción
cobrando vida en el manantial interno,
donde los ríos de lava suben y bajan
provocándole ideas de pecado
en las puertas del incendio
mis labios húmedos hacen religión,
calmando en lenguas extrañas lo que
se descubrirá, cuando su templo se abra
haciendo temblar su eje vaginal
ayes gemidos al morder una y otra vez suave
su clítoris provocando ecos en las paredes
internas de la tentación, que se convierten en agua
contenida filtrándose por gotas, bajando hasta perderse
y secarse en el corsé como un falso agujero negro,
que abre mi imaginación a ninguna pregunta que enfríe,
porque solo quiero sus orgasmos alivios
predicando en su altar, tentándola entre palabras al aire,
inspirado por la presión del escondido geisers, sus ojos
cínicos me dicen lo acertado de mi lengua entre su vulva,
humos de placer invaden el ambiente al Universal aroma
a sexo flameando fantasmales a mi trance psicótico…
calmando mi sed, consumiendo todas sus fuerzas y energías
rendida y orgásmica, se deja caer
me acerco a su oído, susurrándole
Vida… nada mejor y natural para el estrés…
que unos buenos orgasmos
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