como una onda expansiva
la encuentro para que
sienta mi presencia
en su mente retumba
“susurrame”
Su voz siseante y sensual
me convierte en víbora, envolviendo la
suavidad de su cuerpo
vibrando cenestésicamente en su interior
descontrolo sus sentidos, provocándolos,
dilatando sus deseos
juego malvado de no estar
transformándome en dragón
provocándole infiernos
espamos tras espasmos
ella termina rendida y agitada
yá sin líneas, los humos de placer
desaparecen
debo volver…
me estoy llamando
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Deja aquí tu comentario